Cáncer, esa enfermedad de la que no queremos oír hablar cuando vamos a la consulta del médico. Ya con sólo escucharla, e incluso leerla, se nos acelera el corazón. Es una enfermedad temida, casi impronunciable.
Y es que el cáncer es uno de los eventos más estresantes que podemos experimentar los seres humanos. Y es que pocas cosas se pueden comparar con su diagnóstico, que llega a ser un sinónimo de sufrimiento, discapacidad y muerte.
El diagnóstico de cáncer genera un gran impacto en la vida del individuo. Supone un cambio enorme, no sólo en la vida del paciente, sino también en sus seres más queridos y en su entorno. Es un reto vital que afecta a todas las dimensiones del paciente y de sus familiares y, es por esto que se hace fundamental la figura del psicólogo.
En la actualidad, podemos considerar el cáncer como una de las enfermedades más comunes. Sólo el año pasado, se diagnosticaron en España a 290.75 nuevos casos, siendo mayor la incidencia en hombres (168.894 nuevos casos), que en mujeres (121.284 nuevos casos). Y la tendencia va al alta desde 2012, año en el que la incidencia total fue de 250.380 nuevos casos. En 2022, murieron en España 111.426 personas por esta enfermedad.
Estamos hablando de que en el año 2022 murieron miles de personas como consecuencia del cáncer. Es decir, miles de familias experimentaron una pérdida por esta enfermedad. Miles de personas y de familias han experimentado otra pérdida, la pérdida de la salud propia o la de un ser querido, recibiendo así un nuevo diagnóstico de cáncer.
El cáncer es una enfermedad de pérdidas y me gustaría destacar la importancia de que todas estas personas, tanto las personas con cáncer como sus familiares, tengan el acceso a un tratamiento psicológico de calidad, en el caso de necesitarlo.
Entonces, ¿Qué es la psicooncología?
Para definirla, me valgo de las palabras de Juan Antonio Cruzado, que ya en 2003 dijo que “la psicooncología es un campo interdisciplinar de la psicología y de las ciencias biomédicas. Se dedica a la prevención, diagnostico, evaluación, tratamiento, rehabilitación, cuidados paliativos y etiología del cáncer. Además de a la mejora de las competencias comunicativas y de interacción de los sanitarios, de la optimización de los recursos para promover servicios oncológicos eficaces y de calidad”.
La psicooncología se integra entre la psicología de la salud y la oncología médica. Su objetivo es atender todas las respuestas emocionales, cognitivas y comportamentales que puedan experimentar, tanto los pacientes con cáncer, como sus familiares y allegados.
¿Qué función cumple la psicooncología?
La psicooncología nace para acompañar y brindar de estrategias de afrontamiento, a la familia y al paciente durante todo el proceso oncológico. Desde el diagnóstico hasta el final del tratamiento, incluyendo posibles recaídas o, finalmente, el duelo.
La cascada emocional que supone vivir con cáncer precisa, en muchos casos, una atención psicológica especializada. Sin embargo, no es raro ver que muchas de las personas afectadas por el cáncer, no reciben la adecuada atención psicológica para afrontar la enfermedad, a pesar de cada día conocemos más la figura del psicooncólogo. Y es que realmente, no hay mucha presencia de psicólogos en la sanidad pública ni en la privada en lo que respecta al cáncer.
La figura del psicólogo en oncología pretende aliviar el dolor, la incertidumbre y el estrés que puede provocar esta enfermedad. En este sentido, la psicología, además de brindarnos algunas claves para una buena prevención, también nos ayuda a la evaluación de la adaptación a la enfermedad y su tratamiento.
Por esto, los objetivos de la psicología en pacientes con cáncer van desde la intervención al paciente, a su familia y al personal sanitario. Van desde la prevención e investigación de la influencia de los factores psicológicos implicados en la enfermedad oncológica a la mejora del sistema de atención sanitaria.
Es por tanto el psicooncólogo, un profesional aplicado como un investigador de base en un campo especializado en continua evolución y desarrollo.
Es por esto que la labor del psicooncólogo nace de la necesidad de un acompañamiento de calidad en el proceso oncológico. De esta manera, se le brinda al paciente de habilidades para vivir el proceso de enfermedad, con la mejor calidad de vida posible.
¿Cuándo aparece la psicooncología en España?
En España, esta especialidad de la psicología surge en 1984, cuando se celebraron las Primeras Jornadas de Psicología Oncológica organizadas por la Asociación Española Contra el Cáncer. Y es Ramón Bayés, uno de los padres de la psicooncología en nuestro país, el que nos lo cuenta en un artículo publicado en 2011.
¿Cuándo debemos acudir a un psicooncólogo?
Ya sabemos que el cáncer supone un impacto, no sólo en la vida de quién lo tiene, sino también de sus familiares y allegados. Es por esto, que es normal sentir muchas emociones distintas durante este proceso. Entre otras cosas, podemos sentir tristeza, enfado, incertidumbre, miedo, etc.
Sabiendo esto, lo ideal es que desde el momento en el que se nos diagnostica, se pudiese hacer una valoración tanto del paciente como de su entorno más cercano. De esta manera, vemos en qué medida ha afectado este diagnóstico en la vida normal de estas personas. Sin embargo, como he dicho antes, esto es muy difícil de conseguir en ciertas ocasiones.
Por lo que es conveniente acudir a un psicooncólogo cuando estas emociones nos afecten en nuestra vida diaria o se prolonguen en el tiempo. No obstante, también nos puede ser útil acudir al psicooncólogo para que nos acompañe en este proceso, aún sintiendo que estos sentimientos no son excesivamente graves.
Acompañamiento psicológico a pacientes de Cáncer
Como psicooncóloga, entiendo que mi cometido es acompañar al paciente oncológico en todas las fases de la enfermedad. Deberé brindarle de diferentes herramientas para adaptarse a cada una de ellas, de tal modo que su calidad de vida se vea lo menos afectada posible.
Entre otras cosas, este acompañamiento nos puede ayudar a:
- Aceptar el diagnóstico de cáncer.
- Sentirnos menos abrumados por el diagnóstico.
- Integrar las distintas noticias y pérdidas que vayamos experimentando.
- Sentir que tenemos un mayor control sobre la enfermedad y conocer qué cosas podemos hacer para sobrellevarla de la mejor manera posible.
- Aprender a gestionar las emociones que vayan surgiendo en las diferentes fases de la enfermedad, así como la depresión y la ansiedad.
- Convivir con los síntomas y efectos secundarios de los tratamientos.
- Prepararnos para las posibles pruebas y procesos médicos (cirugía, quimioterapia, radioterapia, hormonoterapia, trasplante de médula ósea, etc).
- Manejar las posibles preocupaciones sobre la imagen corporal y los efectos físicos de los tratamientos.
- Gestionar el miedo y la incertidumbre.
- Mejorar la intimidad con la pareja y las relaciones sexuales.
- Afrontar el fin de tratamiento y la incorporación al trabajo o a la escuela.
Además, la psicooncología nos puede ayudar a mejorar la comunicación con el personal sanitario, nuestros familiares y amigos.
Además, me gustaría destacar que cada vez hay más estudios que señalan que el cáncer puede ser una experiencia traumática. Es por ello que se cree que los efectos psicológicos del cáncer pueden ir más allá de la propia enfermedad. De este modo, parece necesario hacer una mejor conceptualización de trauma en pacientes con cáncer e incluir la figura del psicólogo durante todo el proceso de enfermedad y en el alta médica.
El acompañamiento psicológico para los familiares de pacientes con cáncer.
Como hemos ido viendo, el cáncer también afecta a los familiares del paciente oncológico. En mi trayectoria como psicooncóloga, me he dado cuenta de que es muy difícil estar en la piel del paciente oncológico, pero también es muy complicado estar en la papel del familiar y del amigo.
Saber lo que le ocurre a mi ser querido sin preguntar, es muy complicado y más si no se ha vivido un diagnóstico de cáncer. Esta falta de comunicación puede ser una barrera para los familiares de los pacientes.
Por este motivo, cuando un familiar es diagnosticado de cáncer, a veces nos sentimos perdidos, sin saber qué hacer. Nos da miedo preguntarle, pero también queremos saber en todo momento cómo se siente físicamente y emocionalmente.
Y es natural. Son muchas las dudas que tenemos y es normal sentirnos a veces perdidos. Porque claro, cómo le vamos a preguntar si no le queremos recordar que tiene cáncer.
Es por ello que, un buen tratamiento psicooncológico nos puede ayudar, no sólo a afrontar el diagnóstico y a gestionar las emociones, sino también a entrenar habilidades de comunicación para mejorar la comunicación con nuestros seres queridos.
Por otro lado, el tratamiento psicológico nos puede ayudar a gestionar nuestras propias emociones y, en el peor de los casos, nos puede orientar en el duelo.
¿Cómo trabaja entonces un psicólogo oncológico?
Yo, como psicooncóloga trabajo con terapias contrastadas empíricamente en el ámbito de la psicooncología, incluyendo el counselling, técnicas de comunicación, tratamientos psicológicos individuales, así como terapia de pareja y familiar. Es por ello que, en primer lugar, se hará una evaluación clínica que consta de las siguientes cuestiones:
- Adaptación a la enfermedad y a su tratamiento.
- Satisfacción con la información que han recibido por parte de los profesionales sanitarios y de los familiares.
- Participación en la toma de decisiones.
- Confianza en el equipo médico y adherencia al tratamiento oncológico.
- Afrontamiento del diagnóstico y de los tratamientos.
- Gestión emocional de la ansiedad, depresión, autoestima, culpa, ira, incertidumbre, etc.
- Calidad de vida.
- Apoyos familiares y amistades.
A continuación, se realizará la intervención psicológica que se basará, entre otras cosas, en lo siguiente:
- Psicoeducación y orientación en las diferentes fases de la enfermedad y entrenamiento en estrategias para afrontarlas.
- Gestión de la ansiedad, la depresión, la irritabilidad, la incertidumbre, los sentimientos de culpa, la negación, etc.
- Entrenamiento en comunicación para poder expresar el estado emocional.
- Tratamiento de los trastornos asociados al cambio en la imagen corporal.
- Solución de problemas y planificación de actividades.
- Intervención familiar.
- Afrontamiento de los tratamientos oncológicos y de los efectos secundarios de los mismos.
- Problemas sexuales.
- Vuelta a la actividad laboral.
- Recaída.
- Duelo.
- Etc.
El psicooncólogo cuida al paciente oncológico y a sus familiares. Partimos del acompañamiento del paciente en esta tormenta de emociones que experimenta como consecuencia del cáncer. Trabajamos en la aceptación y adaptación en cada una de las fases de la enfermedad. Enseñamos a cuidarnos para poder cuidar.